Líder de una secta religiosa asesina a un pequeñito
Una mujer resultó condenada a una pena de 30 años de prisión, por la muerte de un menor de edad a su cargo; Anna “N” de 79 años, entonces líder de la secta religiosa House of Prayer o Casa de Oración, encerró a su víctima en un armario y lo mantuvo sin comida ni agua.
Lo anterior, hasta que otros miembros de la secta lo encontraron sin vida, indicó la Fiscalía General de Florida en un comunicado sin consignar la edad del niño.
El gran jurado acusó a Young la aprehendieron inmediatamente en el estado de Georgia; desde el momento del arresto, Anna se declaró culpable de asesinato en segundo grado tras la muerte del pequeño.
“Es inconcebible comprender los horrores que esta mujer ha causado; afortunadamente, a los 79 años lo más probable es que muera en la cárcel y nunca más pueda dañar, torturar o matar a otro ser humano”, señaló la Fiscal General de Florida, Ashley Moody.
Según la Fiscalía, la madre entregó al niño a un amigo de la familia en Chicago, pero este último lo llevó a la Casa de Oración.
Los fiscales a cargo del caso describieron el lugar como un espacio de culto religioso con sede en Micanopy en Alachua.