Cambio de identidad, tema pendiente en Tamaulipas
CIUDAD VICTORIA, TAM.- El cambio de identidad de género, así como para cualquier persona heterosexual que desee un cambio de identidad —nombre—, es un tema pendiente de legislar en Tamaulipas. Ni el Poder Legislativo ni el Ejecutivo se han preocupado por validar lo que el Poder Judicial ha aprobado en múltiples ocasiones mediante amparos.
Mercurios Espinoza del Ángel, representante en Tamaulipas de México Igualitario Derribando las Barreras AC, explicó en entrevista con EXPRESO que su agrupación, con representación nacional, ha apoyado a 400 personas de la comunidad LGBT para realizar el cambio de identidad ante la autoridad civil estatal.
El proceso aún debe realizarse mediante un amparo, ya que el Código Civil de la entidad no permite el cambio de identidad de manera directa, como en otras entidades federativas. Hasta la fecha, estados como Ciudad de México, Coahuila, Colima, Hidalgo, Jalisco, Quintana Roo, Michoacán, Nayarit, Oaxaca, San Luis Potosí, Sonora y Tlaxcala han reformado su código civil, permitiendo el cambio de nombre de las personas, generalmente junto con la aprobación del matrimonio igualitario
EL PRIMER CASO EN TAMAULIPAS
En 2018, se logró el primer cambio de identidad en Tamaulipas. Paulina Fernández, originaria de Tampico, fue apoyada por la AC para llevar a cabo el proceso legal y cambiar su nombre.
“En ese entonces, aún no se legislaba sobre el cambio de identidad. Para lograrlo, la interesada presentó una solicitud en la oficina del registro civil donde fue registrada. Al recibir una respuesta negativa, ese documento permitió iniciar el trámite ante un juzgado de distrito”, explicó Espinoza.
El proceso de amparo, que no tiene costo para la AC ni para la persona interesada, concluye con una resolución favorable que se remite a la oficialía del registro civil, donde se lleva a cabo el cambio. “Todas las resoluciones salen a favor, no hay negativas por parte de la justicia federal, ya que se trata de un derecho humano a la identidad”, añadió.
Cada proceso de amparo puede tardar desde tres a seis meses, o hasta un año. Sin embargo, algunos son inmediatos: “De tantos juicios promovidos, a veces el juzgador otorga la medida de inmediato, y en tres días ya está inscrito el cambio en el registro civil y se entrega la nueva acta”, detalló Espinoza.
Al principio, los procesos tardaban más de un año, pero ahora, en algunos casos, los jueces otorgan la protección de manera anticipada y definitiva. Las demandas se presentan contra el Registro Civil, el Poder Legislativo y el Poder Ejecutivo, debido a su negativa a aprobar el cambio de identidad, algo que ya es constitucionalmente obligatorio.
DEMANDAN AL CONGRESO
El décimo noveno circuito federal con sede en Tamaulipas otorgó a la agrupación la protección tras demandar al Congreso del Estado por no atender sus peticiones.
Incluso se han manifestado en la sede del poder legislativo para exigir los derechos de la comunidad LGBT. Aunque se logró la aprobación del matrimonio igualitario sin necesidad de amparo, se dejó de lado el cambio de identidad. “Con la protección obtenida, el Registro Civil está obligado a realizar los cambios de identidad sin necesidad de amparo. Sin embargo, debido a la incompetencia del director, seguimos recurriendo a los amparos”, comentó Espinoza. El cambio de identidad no es exclusivo para personas LGBT; también es un derecho para personas heterosexuales, incluidos niños y niñas.





