Los Dos Laredos está de luto por la muerte de Roberto Galvez
Redacción
Noticias Telered
NUEVO LAREDO.- ¿Cuántas generaciones se despertaron escuchando el famoso “Querreque”, esperar que Galvez dijera que no habrá clases, que nos dijera el clima de la semana o a “Pablo Cuchi-cuchi” con los horóscopos? Roberto Gálvez Martínez, un ícono de la radio po casi 50 años manteniendo informado a ambos Laredos, descanse en paz.
Una historia de éxito y un micrófono se apaga, con la muerte del maestro Roberto Gálvez Martínez; la tradición del baile de los sábados, las posadas, el “Querreque” madrugador, ni Pablo “Cuchi-cuchi” volverán porque el maestro de la voz que daba identidad y alegraba a una estación y toda la región, partió hacia la eternidad.
SUS INICIOS
Desde niño, su ilusión fue pertenecer a una estación de radiodifusión, sueño que se realizó, dejando huella muy marcada en estas dos ciudades fronterizas por su gran labor desempeñada durante 50 años de trayectoria dentro del mundo de la radio, especialmente en estereo 91.
El primer noticiero que se transmitió en Stereo 91 fue de Don Fidel, que trabajaba solo; pero después invitó a José Luis de Anda Yansei, Miguel Ángel Vidal, Juan Reynaldo Lucio y Roberto Gálvez, quien finalmente se quedó con la titularidad del noticiero que hasta ahorita continua vigente como “una buena costumbre en radio”.
Desde muy pequeño gustaba mucho de la locución, cuando escuchaba la radio se imaginaba los locutores y los reportajes que hacían, fue hasta julio de 1974 que entró a a Estero 91, 46 años pasaron en la misma estación de radio, en 1977 tramitó en la Ciudad de México la licencia como locutor.
Roberto Gálvez se convirtió en todo un ícono de la radio, las muestras de cariño del público lo posicionaron como uno de los mejores locutores, críticos y periodistas de Nuevo Laredo y Laredo, Texas.
También aprendió gracias a otros locutores de diferentes épocas, principalmente a los que sonaban en esa época como Alfredo Briseño, le llamaba “el fósil” que era locutor de los años 50, también a Octavio Benavides Hinojosa y a Don Fidel Cuéllar.
Como locutor dejo un legado a nuevas generaciones que desean dedicarse a esta labor a que se preparen para que el trabajo periodístico que desarrollen sea ágil y variado para que todos los días den a conocer algo diferente a los radioescuchas.
Se fue un ícono en la radio, ¡Adiós Maestro!