Vuelven a pelear por desafuero
CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- De nueva cuenta, se presentaron en el pleno del Congreso, gritos, jaloneos y toma de la mesa directiva, ahora, por la propuesta del PAN para no desistirse de las controversias relativas al desafuero del gobernador.
La situación se presentó cuando se registraba un receso de 20 minutos, decretado a solicitud de Isidro Vargas de Morena, para estudiar la propuesta realizada por el diputado Félix Fernando García Aguiar, a nombre de la bancada panista.
La morenista, Magaly Deandar Robinson, aprovechó para acercarse a la mesa directiva y tomar las carpetas con documentos de la presidenta, Imelda Sanmiguel Sánchez y de los secretarios, además de su micrófono.
Otros diputados de Morena se acercaron también, Isidro Vargas tomó el micrófono de la secretaria de la mesa directiva, Leticia Vargas y lo guardó en su pantalón, bajo el saco, siendo seguido por el diputado Carlos Fernández, quien trataba de captar con su celular dónde tenía guardado el micrófono.
El morenista caminó hacia el otro lado de la mesa y le entregó el micrófono a Juan Vital, quien a su vez lo pasó a su compañero de Morena, Alberto Granados, quien lo guardó también en su bolsa, para luego, esconderlo en una de las macetas.
Luis René Cantú, se acercó y comenzó a gritar, “eso es Morena, no mentir, no robar”, señalando a Magaly Deandar, quien se negó a entregar sus pertenencias a Imelda Sanmiguel.
La morenista se aferró a las carpetas y comenzó a caminar entre las curules, seguida de Sanmiguel Sánchez, que nada pudo hacer por recuperar sus documentos.
En un momento, la panista Lidia Martínez López, trató de arrebatar las carpetas, pero Deandar Robinson la señaló y le pidió que no la tocara; “pareces niña”, le gritaba otra de las diputadas del PAN.
Arriba en la mesa directiva, panistas y morenistas alegaban sin llegar a un acuerdo; abajo, Alejandra Cárdenas del PRI, haciendo un llamado a la cordura, les pedía que si querían debatir, usaran la tribuna.
Ante ello, sin micrófono, Imelda Sanmiguel, presidenta de la mesa directiva, decretó un nuevo receso y anunció que la sesión se reanudaría a las 3:00 de la tarde.
Al retornar a la sesión, se realizó la votación, del punto de acuerdo, por el que el Congreso de Tamaulipas, acordaba no desistirse de las controversias constitucionales 50/2021 y 70/2021, promovidas por la 64 legislatura, misma que fue aprobada por 18 votos a favor, 17 en contra y la abstención de la morenista Nancy Ruiz Martínez.
De esta manera, será la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la que resuelva el fondo de las controversias.
Al presentar la iniciativa, el diputado, expuso que el artículo 111 constitucional, brinda las garantías para que los representantes populares, puedan ejercer su encargo, por el tiempo para el que fueron electos, ajenos a presiones políticas.
“Lamentablemente, en ocasiones esas presiones políticas, toma la forma de fabricación de delitos por parte de instituciones de procuración de justicia, y sobre las cuales, ya sea en forma de filtraciones, rumores, campañas y linchamientos mediáticos, en ocasiones los jurados de procedencia son condicionados para resolver sobre bases falsas e inciertas, actuando bajo una consigna propiamente política”.
Agregó que la correcta interpretación del tribunal constitucional del marco jurídico, es la garantía de unidad y estabilidad del pacto federal, toda vez que sus resoluciones actúan como freno.
Tras lo ocurrido en la sesión, la diputada Magaly Deandar, publicó su versión en redes sociales, donde aseguró que lo que hizo fue para evitar que se aprobara lo que consideró un “doble blindaje”.
“Aunque traten de desviar la atención, la realidad es que voy a seguir defendiéndolos con uñas y dientes”, dijo.